" Una mañana, nos regalaron un conejo de indias. Llegó a casa enjaulado. Al mediodía, le abrí la puerta de la jaula.
Volví a casa al anochecer y lo encontré tal como lo había dejado: jaula adentro, pegado a los barrotes, tem-blando del susto de la libertad".
Galeano, gracias.
FREEDOM... me haces falta, en que país estas ahora? Ven a abrazarme, el vértigo del precipicio me impide de danzar en el borde de la vida ! Siberia esta lejos?